El Día Internacional de la Mujer Rural fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2007 con el objetivo de reconocer su contribución fundamental, no solo a la vida en las zonas rurales, sino a los grandes temas que dominan la agenda del desarrollo.
Sin ellas, el mundo no podría resolver el problema creciente del hambre. Sin ellas, sería imposible erradicar la pobreza. Sin ellas, no hay futuro.
A pesar de su contribución fundamental, han sido invisibles ante los formuladores de política, suelen quedarse por fuera de las estadísticas de empleo y de los beneficios de programas. La agenda del desarrollo del Milenio promulgada por las Naciones Unidas en el año 2000 ni siquiera las menciona. En realidad, no menciona tampoco la agricultura, el sector que emplea a la mayoría de las mujeres de los países más pobres. Afortunadamente, para el año 2015, cuando los países del mundo entero se pusieron de acuerdo sobre sus nuevos objetivos de desarrollo, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), se logró darle reconocimiento tanto a la agricultura como a la mujer rural.
e los hombres a todo lo que necesitan para ser productivas en agricultura, incluyendo la tierra, el crédito, los servicios de extensión y los insumos. La FAO calcula que si las mujeres tuvieran el mismo acceso que los hombres ya tienen a todos estos elementos, se podría reducir el hambre global en más de cien millones de personas.
Por primera vez en la historia, el mundo ha reconocido, a través de los ODS, la necesidad de que las mujeres tengan acceso a los recursos productivos en las áreas rurales como un elemento clave en la agenda de desarrollo internacional y en especial en cuanto a la seguridad alimentaria.
El Día de la Mujer Rural se celebra el 15 de octubre, y no es una coincidencia que sea justo antes del Día Mundial de la Alimentación, el 16 de octubre. Se escogieron las fechas adyacentes para realzar la relación entre la mujer rural y la seguridad alimentaria mundial.
Este 15 de octubre será una fecha especial, no solo por la oportunidad de celebrar a la mujer rural y crear conciencia sobre su contribución, sino también porque coincide con la edición número 70 de la revista de AFAMMER, una de las instituciones que más se ha destacado por visibilizar a la mujer rural.
Gracias, AFAMMER, por recordarnos continuamente que sin mujeres rurales, no hay futuro.
