La presidenta nacional de AFAMMER participa en la conferencia Las Mujeres Rurales y la España Vaciada celebrada en el Real Casino de Madrid.
La presidenta nacional de AFAMMER, Carmen Quintanilla, y la directora del programa Ellas Pueden de Radio 5 y Sin Género de Duda, Marta Pastor, y la portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cuca Gamarra han abordado la importancia de las mujeres rurales a la hora de combatir la despoblación en la conferencia “Las Mujeres Rurales y la España Vaciada” celebrada en el Real Casino de Madrid.
Carmen Quintanilla destaca que las mujeres del medio rural han conseguido notables avances durante la democracia, sobre todo a nivel legal, pero señala que todavía son numerosos los retos y las desigualdades a las que se enfrentan. Y avisa que “dos de cada tres personas” que abandonan el medio rural son mujeres.
La despoblación tiene nombre de mujer
La presidenta de AFAMMER alerta que en España hay 1.108 municipios en los que no vive un solo niño de entre 0 y 4 años y que existen 311 localidades sin menores de 20 años.
“La inmensa mayoría de nuestros pueblos pierden población por la fuerte masculinización del entorno, el sobre-envejecimiento y la falta de conciliación que dificultan el emprendimiento y el empleo de las mujeres”, señala.
Así mismo, alude la escasez de servicios y la falta de recursos públicos que dificultan la vida de los habitantes del medio rural. “El 22% de los municipios de menos de 10.000 habitantes tienen dificultades para acceder a los servicios sanitarios de atención primaria mientras que un 19% tiene dificultades para acceder a los centros de enseñanza obligatoria”.
Dos generaciones: la generación soporte y las jóvenes cada vez mejor formadas
Quintanilla señala la existencia de dos generaciones de mujeres en el medio rural. “Por un lado está la generación soporte, que son las que cuidan de las personas mayores y las personas dependientes y por otro lado tenemos a las mujeres jóvenes que cada vez están mejor formadas y quieren permanecer en sus pueblos, sin embargo, son las primeras en marcharse ante la falta de oportunidades”, destaca.
Y hace referencia a que el 39% de las madres del medio rural no tienen acceso a escuelas infantiles y a que el 58,6% de las personas que cuidan a personas mayores o dependientes son mujeres.
“Hay despoblación porque hay masculinización, sobre-envejecimiento y falta de conciliación y las mujeres rurales hoy están más formadas que los hombres y ya no están dispuestas a vivir sin libertad”, afirma con rotundidad.
Destaca que a pesar de que el porcentaje de mujeres rurales con estudios universitarios es el doble que el de los hombres – un 20,7% frente al 10,7% – la tasa de paro femenino en las menores de 25 años del medio rural roza el 50% frente al 41% de las que viven en las ciudades mientras que el desempleo en los jóvenes del medio rural es algo más bajo que los que viven en zonas rurales.
“Todavía estamos a tiempo de impedir que nuestros pueblos se vacíen”
La presidenta nacional de AFAMMER también ha hecho referencia a “datos optimistas que nos hacen pensar que todavía hay futuro para el medio rural y para sus mujeres”. En ese sentido destaca la necesidad de seguir apoyando a las emprendedoras rurales que crean el 54% del empleo autónomo y el hecho de que “ocho de cada diez emprendedoras rurales” apuesten por emprender en servicios y productos carentes en el entorno.
Quintanilla también apuesta por el turismo rural como solución al problema de la despoblación. Un turismo que señala en su mayoría está en manos de mujeres. “Cuando a finales de los 80 en AFAMMER comenzamos a formar a mujeres en turismo rural no podíamos alcanzar a imaginar que hoy serían dueñas de más del 56% de los alojamientos rurales”, señala.
Por último, destaca que el COVID ha sacado a relucir desigualdades ya existentes. “La vuelta a lo rural que nos ha traído la pandemia ha sacado a relucir la escasez de viviendas y la falta de infraestructuras, especialmente en las nuevas tecnologías, pues el 60% de los municipios rurales se encuentran en la denominada zona de sombra. Es decir no tienen conexión por banda ancha o si la tiene es muy defectuosa o es cara”.
Señala la inseguridad jurídica de las personas que no tienen acceso internet o no saben manejar herramientas digitales. “Hoy tener y saber manejar la firma digital es primordial para realizar cualquier gestión administrativa, por ello AFAMMER en colaboración con Endesa está desarrollando un programa para impulsar la digitalizaciones de las pymes rurales y aquellas personas que no saben usar este tipo de herramientas indispensables hoy en día”.