EN SU INTERVENCIÓN DESTACÓ QUE “EL ÉXITO NO PUEDE ALCANZARSE SIN TRABAJO NI ILUSIÓN POR HACER LAS COSAS QUE DEBEN HACERSE EN CADA MOMENTO”
La presidenta nacional de AFAMMER y presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, Carmen Quintanilla, recibió en la tarde-noche de ayer lunes el nombramiento de Hija Adoptiva de la Villa de Socuéllamos de manos del alcalde de este municipio manchego, Sebastián García, tras haber sido leído el acuerdo plenario por el que se aprobó este nombramiento honorífico, lectura que corrió a cargo de la juez instructora del expediente y concejala de Urbanismo y teniente de alcalde, Pruden Medina, en el acto que tuvo lugar en el Auditorio Reina Sofía de este municipio.
En su discurso, Carmen Quintanilla expresó su “más emocionado” agradecimiento al alcalde y a su Equipo de Gobierno y al pueblo de Socuéllamos, representado por la más de una treintena de asociaciones, hermandades, cofradías, cooperativas, entidades, sociedades de transformación agraria e instituciones que se han adherido a su nombramiento, que la convertía oficialmente “en una socuellamina más”, algo que ya era de corazón.
También dio las gracias a su familia y a los numerosos alcaldes, portavoces y concejales de gran parte de la provincia que se dieron cita en el acto así como diputados nacionales y senadores y a las presidentas y socias de AFAMMER que también la acompañaron en este emotivo acto.
La presidenta nacional de AFAMMER, parafraseó un proverbio chino que dice “cuando bebamos agua, recordemos la fuente” para añadir que “es un honor recibir una distinción tan especial como la que Socuéllamos me otorga hoy… y recibirla pro hacer lo que debía ser hecho, es un doble honor”. Se refería así Carmen Quintanilla a todos los momentos, recordados momentos antes por el alcalde de la Villa, Sebastián García, en los que ha estado junto al pueblo de Socuéllamos, defendiendo sus intereses como una socuellamina más, como por ejemplo, en el encierro de 2007 de la Plataforma por la Viña y el Agua.
Quintanilla añadió que “nunca se puede alcanzar el éxito sin trabajo, ni ilusión por hacer las cosas que deben hacerse en cada momento y así poder alcanzar los objetivos que la sociedad anhela; así ha sido y así espero que con vuestra ayuda pueda seguir siendo en un futuro”. En esta misma línea, subrayó que “hoy nos acompañan aquí personas que son un ejemplo y que nos indican cómo compartir con la ciudadanía la esperanza de conquistar un futuro para ponerlo al servicio de la juventud y, como dijo Einstein, dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás, es la única manera”.
La presidenta nacional de AFAMMER recordó los merecimientos que se señalaban en el acuerdo plenario para justificar su nombramiento como Hija Adoptiva y aseguró que “todos los casos en los que ha estado al lado del pueblo de Socuéllamos tenían fundamento para que dedicarles toda la atención y la dedicación, fuese lo procedente”.
Carmen Quintanilla se preguntó ¿de qué sirve un sueño si no se cuenta con un lugar para llevarlo a cabo?, a lo que respondió que “nosotros tenemos Socuéllamos, Castilla-La Mancha y España, por quienes merece la pena trabajar para que nuestros sueños se conviertan en realidad” para lo cual aseguró que Socuéllamos puede contar con ella “para llevar a cabo y hacer posible lo que imaginéis”.
Finalizó recordado aquella máxima de Don Quijote: “Sábete amigo Sancho, que no es un hombre más que otro si no hace más que otro”, a la que agrego que “en el objetivo común todos somos igualmente necesarios y, espero que bien hallados, en los meses venideros donde tendremos que dar lo mejor de nosotros mismos para poner a disposición de los ciudadanos y de nuestros vecinos el mejor futuro posible”.
El acto, al que asistieron cerca de quinientas personas, fue clausurado por el delegado de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Ciudad Real, Antonio Lucas-Torres y estuvo amenizado en varios momentos por el Coro Femenino de la Universidad Popular.