La presidenta nacional de AFAMMER ha participado en la tertulia Políticas de Igualdad: reclamo publicitario o conciencia real enmarcada dentro de la III Edición de los Premios Mujer Agro que organiza Siete Agromarketing y ECAComercio Agrario para visibilizar a la mujer-agroprofesional.
Quintanilla ha analizado las políticas en materia de igualdad durante la democracia española y cómo han influido en la vida de las mujeres, especialmente las que viven en el medio rural. “La igualdad no es un simple reclamo publicitario pues ya en 1978 nuestra Constitución rompió con todas las formas de discriminación contra la mujer, pues sirvió para empezar a crear conciencia social entre mujeres y hombres, haciendo un discurso del feminismo basado en la cooperación”, destaca.
Y añade que España es uno de los países más avanzados en materia de igualdad y que Europa es el continente donde más se respetan los derechos humanos, a pesar de “los errores cometidos en la gestión de la pandemia del coronavirus”.
Así mismo, ha explicado la evolución de las mujeres desde los inicios de la transición hasta ahora. “En AFAMMER conseguimos romper los prejuicios de ser mujer y ser de pueblo en un momento en el que las mujeres rurales no estaban presentes en las agenda política y de los medios de comunicación, consiguiendo dar voz a sus reivindicaciones ante los más altos organismos nacionales e internacionales”, afirma.
Conciencia social para derribar las barreras todavía existentes
Quintanilla considera que aún queda un largo camino por recorrer para romper con las barreras que impiden que la igualdad de oportunidades sea real.
Destaca la brecha digital que impide que a día de hoy todavía existan municipios sin acceso a internet de calidad; la escasa presencia de las mujeres en la toma de decisiones de organismos tan importantes para el medio rural como son las cooperativas y organizaciones agrarias y la especial vulnerabilidad de las mujeres que sufren violencia machista en los pequeños municipios “que tardan más tiempo en verbalizar su situación lo que complica que puedan salir de ella”.
Para la presidenta nacional de AFAMMER la clave para seguir avanzando en igualdad es la legislación acompañada de conciencia social y el respeto a la sociedad civil.
El reto: más explotaciones agrarias en manos de las mujeres
Quintanilla enfatiza que la igualdad y el liderazgo femenino beneficia a las mujeres y a los municipios en los que se encuentran. “El avance de las mujeres es vital para luchar contra la despoblación por ello hay que poner en marcha medidas que hagan posible su liderazgo en las explotaciones agrarias, porque con ese liderazgo haremos posible que cada vez más mujeres apuesten por vivir en los pueblos”, señala.
En este camino considera que es necesario que la futura Política Agraria Comunitaria tenga en cuenta a las mujeres y que se dé un mayor impulso político a la Ley de Titularidad Compartida en las Explotaciones Agrícolas, que nació para visibilizar el trabajo de las mujeres en el sector agrario y dar respuesta a la falta de profesionalización agraria llevada a cabo por las mujeres rurales durante generaciones.
“Desde que esta Ley entrará en vigor en el año 2011 tan solo se han inscrito 756 mujeres como cotitulares porque ha faltado información y formación. Por lo tanto, es necesario dar un mayor impulso a esta ley porque así estaremos dando ejemplo para que cada vez más mujeres jóvenes apuesten por ser titulares de explotaciones agrícolas y no se marchen de nuestros pueblos”.
