Carmen Quintanilla, presidenta nacional de AFAMMER (Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural), ha participado como ponente en el Simposio Internacional «Empoderamiento de las mujeres mediante la innovación en los sistemas agroalimentarios del Mediterráneo», organizado por CIHEAM Zaragoza y la Unión por el Mediterráneo (UfM), con la colaboración de la Secretaría General del CIHEAM y el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
Este simposio ha reunido a responsables institucionales, organizaciones internacionales, representantes de la sociedad civil y expertos en innovación agroalimentaria, con el objetivo de visibilizar el papel estratégico que desempeñan las mujeres en la transformación sostenible del medio rural en la región mediterránea.
Durante su intervención en la mesa redonda dedicada a la experiencia española, Carmen Quintanilla compartió la trayectoria de más de cuatro décadas de AFAMMER como organización pionera en la defensa de las mujeres rurales. En su discurso, destacó la importancia de iniciativas legislativas como la Ley de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, promovida por la entidad y considerada un avance histórico en el reconocimiento jurídico y económico del trabajo femenino en el campo.
También puso en valor las acciones desarrolladas por AFAMMER en formación online y presencial para el empleo y el emprendimiento; alfabetización en competencias digitales básicas y profesionales; impulso del liderazgo femenino, así como los diferentes programas para prevenir y erradicar la violencia de género en los entornos rurales “donde es más difícil romper el silencio por el miedo y la vergüenza a sentirse señalada”.
La necesidad de apostar por políticas coordinadas y con enfoque territorial
Quintanilla destacó los retos que persisten en el entorno rural, como la falta de conectividad digital, el acceso desigual a recursos, la escasa presencia femenina en los órganos de decisión agrarios o el impacto de la despoblación en la igualdad de oportunidades. En este sentido, reclamó una mayor coordinación institucional y una inversión pública que contemple indicadores específicos de género y territorio, así como mecanismos normativos que garanticen la participación efectiva de las mujeres en los espacios donde se toman decisiones estratégicas para el desarrollo rural.
La presidenta nacional de AFAMMER asegura que desde la organización seguirán trabajando para que las mujeres rurales ocupen el lugar que les corresponde como agentes de cambio en el desarrollo económico y social de sus territorios.